Reseña de manga: Noragami (tomo 11)

Título: Noragami
Autora: Adachitoka
Tomo: 11 de 19 (serie abierta)
(Reseñas de los tomos anteriores)
Publicación: Mensual
Editorial: Panini Manga
*Gracias a Panini por el manga*
Género: Comedia, sobrenatural, acción
Demografía: Shōnen
Sinopsis:

Yato logra escapar del inframundo, pero esta aventura lo dejó marcado y lo ha puesto a pensar. Ahora tomó la decisión de no matar nunca más a nadie, y ahora más que nunca, desea dedicarse a hacer felices a las personas… Empieza liberando a Nora y concentrándose en Yukine, a quien pide ayuda para seguir este nuevo camino… ¿Logrará dar un giro tan radical? ¡Descúbrelo en el tomo 11 de Noragami! ¡A la venta ya!

Yato ha regresado del inframundo y busca ser un Dios de la fortuna pues ya no quiere ser recordado como el dios de la calamidad, para eso recurre a Yukine quien gracias a los entrenamientos de Kazuma de ha convertido un un excelente guía. Y así, los esfuerzos de Yato para convertirse en un mejor dios comienzan pero lo que ambos desconocen es que el padre de Yato también se está preparando, entrenando ayakashis capaces de controlar humanos.


Una vez más lo voy a decir pero... ¡Tengo un nuevo tomo favorito dentro de este manga! Y es que si me pongo a pensar, este décimo primer tomo es el que menos acción tiene pero es el que más datos nos da. Por ejemplo, el tomo comienza con todo el trabajo que Yato ha estado haciendo para ser un Dios de la fortuna y la verdad me parece super interesante ver no sólo la evolución de Yato sino también la de Yukine que comenzó como un niño malcriado pero ahora digamos que es más consiente y responsable que Yato.

En este tomo también veremos como la relación entre Yato y Hiyorin va cambiando y debo decir que me gusta mucho como se lo están tomando las autoras pues aunque ya sabemos que Yato es un intenso fastidioso, no es capaz de comprender aún no que de verdad siente por ella y ella está en las mismas. Y si ver a estos dos tratando de comprender lo que sienten el uno por el otro no fuese suficiente, en el segundo capítulo tenemos a Yato cumpliendo uno de sus sueños, o sea yendo a Capyperland, un parque de diversiones que supuestamente fue creado por unos seres fantásticos en los que Yato cree ciegamente. Debo decirles que después del Yato oscuro que las autoras nos habían demostrado en los últimos tomos ha sido una verdadera delicia verlo siendo tan inocente y un tanto bobo (más bobo, quiero decir xD) y creo que esto es una de las mil razones de porque amo a Yato y es que pese a su oscuro pasado es un ser con un alma noble y eso queda demostrado una vez más cuando Kofuku cuenta su historia y la de Daikoku, pues resulta que hace muchos años atrás, Yato también salvó a Daikoku cuando lo necesitaba.

Esta historia de Daikoku no sólo nos permite ver a un Yato desinteresado al que no le gusta ver sufrir a las personas sino que también nos deja ver más la tristeza con la que las armas divinas tienen que vivir día con dia. Y es con esto precisamente con lo que las autoras cierran este tomo pues en una pequeña historia conoceremos a la hija de Mayu, la antigua Shinki de Yato, a quien Yato ayuda a reunir una última vez con su madre aunque Mayu no logre recordarla pues al parecer si los shinkis recuerdan su vida pasada puede que un secreto de los dioses sea revelado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu visita :)

Di tu opinión con respeto y por favor sin SPAM, ni links.
CUALQUIER COMENTARIO RELACIONADO CON PDF, SERÁ ELIMINADO

Si quieres afiliar o ponerte en contacto conmigo, escríbeme a chaos_angeles@hotmail.com
Comentarios irrespetuosos y Spam serán eliminados.