2000 calorías... (Reseña)

Título: Corazón de Mariposa

Saga: Libro único
Autor: Andrea Tomé

Editorial: Plataforma Neo/Urano
*Gracias a Ediciones Urano por el libro*

Sinopsis:

Victoria y Kenji comparten un secreto: las cicatrices que recorren sus muñecas. Para ella, los días transcurren contando calorías e intentando que su hermana no la obligue a comer más de lo que ella considera suficiente. Él vive escondiendo las marcas de su pasado bajo tatuajes y trabajando de sol a sol en un bar para amantes del rock.

Ambos están solos, aislados del mundo…

Hasta que Kenji descubre a Victoria en los baños del bar donde trabaja rodeada de un charco de sangre. Todos creen que ha intentado suicidarse, porque sufre anorexia, porque su novio acaba de dejarla, porque en definitiva parecía inevitable. Pero nadie la entiende realmente… hasta entonces.Victoria y Kenji se mueven a la velocidad de la vida e, inevitablemente, acabarán encontrándose.

Si hay una enfermedad jamás entendida, es la anorexia. 

Alguna vez en alguna de mis prácticas me tocó trabajar con chicas con trastornos alimenticios y debo confesar que siempre trataba de saltarme estas prácticas, pues realmente sufría al ver a estas chicas. Muchos de mis maestros trataban de explicarnos porque era importante ayudar a estas chicas, pero, ¿realmente lográbamos comprender sus mentes? Yo creo que no. Por muchos estudios que se tengan, jamás lograremos comprender del todo lo que estas chicas sufren.

Por eso este libro ha sido todo un descubrimiento para mí.

Me han amasado como a una leona buena, expuesto con el cartel "anoréxica rehabilitada" y llenado de comida como una piñata. En mis muslos, en mi vientre y en mis caderas se acumula, latente, la grasa. Y me asfixia. A mi cuerpo de porcelana no le gusta sentirse pesado.

Nuestra narradora es Victoria, una chica que ha estado luchando con la anorexia desde hace unos años. Ella ha recaído un par de veces pero siempre se ha rehabilitado y ha intentado llevar una vida normal, hasta que su novio la deja.

Cuando Marco la deja, Victoria no sabe cómo reprimir el dolor, así que termina haciéndose nos cortes en los brazos, pero algo salió mal y termina en un hospital y con todo el mundo creyendo que quiso suicidarse. 

A nadie le gusta admitir que tiene anorexia porque, a partir del instante en que lo haces, dejas de ser una persona. Te conviertes en un número en una lista, en un caso perdido, en una loca que juega a coser alambres de espino sobre sus costillas. Todos te miran y dicen: «¡Come!», sin saber que lo que te piden es tomar la decisión más difícil de tu vida. La anorexia es una enfermedad egoísta y, aunque es una vergüenza tenerla, a veces me gusta. A veces consigue que me sienta fuerte porque soy capaz de hacer cosas que los demás no pueden. Adelgazar es mi talento más arraigado. 

Comencé a leer este libro esperando que la historia fuese “desgarradora” y sabiendo que seguramente me dejaría traumatizada un poco, pero la verdad es que no fue así.

Como ya dije, la anorexia es un tema al que estoy acostumbrada pero aun así no logro entender del todo. Quizá no todos lo saben, pero en las solapas del libro se nos cuenta que la misma autora sufrió de este trastorno, así que agradezco y aplaudo a la autora por saber transmitir la angustia y el

sufrimiento que se vive con la anorexia. 

En este aspecto quede encantada con la historia, pues como les comentaba, por muchos estudios que hagamos, jamás lograremos comprender esta distorsión de la realidad que la anorexia trae consigo y gracias al libro puede explorar el otro lado de la moneda. 

Pero a pesar de lo duro y real que es tema, no termine de hacer clic con la historia de la protagonista. Sentí que más que una historia estaba leyendo uno de los expedientes de una paciente. 

Miro a mí alrededor y solo hay niñas asustadas del mundo y de sus propios sentimientos. En terapia nos dicen que debemos engordar para estar guapas, que nadie podrá querernos si no nos queremos a nosotras antes, pero se equivocan. Deberían decirnos que estamos guapas todos los días, pase lo que pase, pesemos lo que pesemos, que ya estábamos guapas antes de empezar a adelgazar.

Otra cosa que no termino de gustarme fue el romance. Ya saben que soy muuuuy especial con los romances (por no decir otra cosa xD) y el que se nos cuenta en este libro surge prácticamente de la nada. Quiero decir, si, Kenji le salva la vida y entiendo que Victoria sienta cierta conexión con él por ello, pero sentí que solo intercambiaron un par de palabras y ya se amaban. 

La historia en si se lee súper rápido, gracias a la narración ligera de la autora y admito que el final a pesar de ser tan abierto me ha gustado, pero por desgracia al no lograr sentir empatía por los personajes (en especial con la protagonista) no logre disfrutar la lectura como me hubiese gustado.

Aun así, los invito a darle una oportunidad a la autora porque de verdad que este es un tema de lo más interesante que no se ve en muchos libros juveniles. 

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