Reseña: Una canción salvaje de Victoria Schwab

Título: Una canción salvaje
Saga: Los monstruos de Verity
Autora: Victoria Schwab
Editorial: Puck/Urano
*Gracias a Ediciones Urano por el libro*
Sinopsis:

Kate Harker quiere ser despiadada como su padre. Tras cinco años en los que pasó por seis internados, al fin regresa a casa para demostrar que puede serlo. 

August Flynn quiere ser humano. Pero no lo es. Es un monstruo, capaz de robar almas con una canción. Es uno de los tres monstruos más poderosos de una ciudad plagada de estas criaturas. El arma secreta de su propio padre. 

Su ciudad está dividida. 

Su ciudad está desintegrándose. 

Kate y August son los únicos que pueden ver ambos lados, los únicos que podrían hacer algo. Pero ¿cómo te decides a ser héroe o villano cuando es tan difícil distinguirlos?

Hace unos años el caos se desató en Verity y los monstruos aparecieron, ahora tras una lucha de poderes la ciudad se encuentra divida en dos por un Tajo. La parte del norte está gobernada por Callum Harker, este lado aparentemente es seguro y moderno pero tras las sombras acechan los monstruos esperando hincarle el diente a la gente que no cuenta con la protección de Harker. El lado sur está gobernado por Henry Flynn, este lado prácticamente está en ruinas porque a diferencia de Harker quien hace tratos con los monstruos, Flynn prefiere luchar contra ellos. 

Entre Harker y Flynn hay una tregua a la cual llegaron después de una gran batalla donde dicen que Flynn desató una bomba que prácticamente aniquiló una gran parte de la ciudad, pero después de seis años de relativa paz, el acuerdo comienza a flaquear y ambos lados saben que la paz está a punto de terminar, por lo cual el lado de Flynn decide mandar a su arma secreta a la escuela donde la recién llegada hija de Harker comenzó a estudiar. Es así como los caminos de August y Kate se unen y ahora ambos tendrán que unirse si quieren sobrevivir a un lugar donde la violencia genera monstruos. 

Monstruos, monstruos, pequeños y grandes. Pronto vendrán y a todos comerán

Voy a comenzar diciéndoles que tenía muchas, pero muchas ganas de probar la pluma de la autora ya que todo lo que he escuchado de ella son maravillas y al leer este libro pude comprobar el porqué de tantos halagos. 

Schwab nos presenta un mundo lleno de monstruos. Los hay de tres especies. Los Corsai que se alimentan de carne y hueso. Los Malchai que viven de la sangre y los Sunai quienes roban el alma. Estos últimos son los monstruos más raros que hay y poco se sabe de ellos. Estas tres especies de monstruos nacen de los pecados de los humanos y eso fue lo que más me encantó de la novela, pues fue un gran punto a favor que la autora decidiera manifestar en forma de monstruos los crímenes de la humanidad. Mientras peor el crimen, más peligroso el monstruo que se engendra. 

Otro gran punto a favor de la novela es el GRAN debate entre el bien y el mal que nos acompaña a lo largo de la historia. 

Por ejemplo, tenemos a August, nuestro protagonista que pese a ser un monstruo batalla contra su propio ser para no serlo. Él le encantaría ser humano y de verdad que odia lo que es. Pero además aunque es un monstruo es el personaje más vulnerable de la novela y me gustó demasiado esto y sip, se ganó parte de mi corazón negro al verlo pelear a veces literalmente con uñas y dientes para no ser el monstruo que algunos quieren que sea y al final fue quien más evolucionó en la novela dejando de lado al chico/monstruo asustado que era. 

Kate por su parte también tiene su propia lucha. Ella al contrario que August busca ser mala deliberadamente para demostrar que es hija de su padre pero igual se encuentra muchas veces entre la línea de lo malo y lo bueno.

La ambigüedad entre el bien y el mal es tal que hay veces que los monstruos son más humanos y los humanos son más monstruos. 

Así es la vida, August. Tú querías sentirte vivo, ¿verdad? No importa si eres monstruo o humano. Vivir duele.

El ritmo de la novela me pareció adecuado. Al principio sí que comienza un poco lento pero con el avanzar de las hojas esto va cambiando y pasan mil cosas por minuto y la lectura de verdad que se hace adictiva. Y si aún no los convenzo para leerla, permítanme decirles que no hay ningún romance que entorpezca la historia. Esto de verdad me ha parecido un gran detalle, creo que si hay cierta conexión entre Kate y August pero la autora manejó todo para al final dejarnos con la miel en los labios. Y eso también es aplicable para al final ya que me pareció bastante coherente y perfectamente planeado para dejarnos con ganas del segundo libros YA. 

Podía ser el monstruo, si así lograba que otros siguieran siendo humanos. 

En resumen, Una canción salvaje nos presenta un mundo lleno de monstruos donde el bien y mal se enfrentan constantemente. Donde la violencia engendra monstruos pero en donde también hay bondad en donde se supone que no debería de haber.