Sólo hay un camino hacia la paz... (Reseña)

Título: Mi corazón y otros agujeros negros

Saga: Libro único

Autor: Jasmine Warga

Editorial: Montena/PRH

*Gracias a PRH por el libro*

Sinopsis:

Aysel tiene 16 años y le faltan motivos para seguir adelante. En un pequeño pueblo donde ser diferente está mal visto, ella carga con el peso de tener un nombre y un aspecto extranjeros y con el estigma del terrible crimen que su padre cometió. Sin amigos y con una familia que le rehúye, Aysel siente que su corazón es un agujero negro y que algo en su interior devora todos sus sentimientos.

Toda cambia para Aysel cuando conoce a Roman, un chico que vive atormentado por la culpa. Con Roman las horas que antes se le hacían inacabables ahora pasan volando. Con Roman es capaz de imaginar un mundo mejor. Con Roman podrá hablar de los secretos que ha escondido durante años... A medida que los dos jóvenes vayan conociéndose, Aysel deberá decidir: ¿sigue queriendo acabar con todo?, ¿o prefiere ver qué les depara el futuro?

Al iniciar este libro pensaba que iba a encontrarme con un romance adolescente así que ya imaginaran mi sorpresa al leer el primer capítulo y darme cuenta que la historia iba sobre la muerte y la depresión. 

A veces me pregunto si mi corazón es como un agujero negro: tan denso que no deja espacio para la luz, aunque eso no signifique que no pueda tragarme.

El libro nos cuenta la historia de Aysel una adolescente que hace tres años fue una víctima colateral del crimen de su padre. Desde que su padre matará a un chico muy conocido de la comunidad todo el mundo juzga y a parta a Aysel, pero para ella lo que la gente cuchichee a su alrededor no importa ya que a ella le preocupa más la babosa que vive en su interior y que se come todos sus escasos sentimientos felices dejándole sólo los sentimientos deprimentes. Esa babosa de su interior la atemoriza más que nada en el mundo porque significa que algún día va a terminar con la misma locura que apresaba a su padre. Por eso decide que sólo tiene una solución que la alejará de ese camino. Aysel va a suicidarse y como no quiere hacerlo entra en línea a la página “Camino hacia la paz” donde puede encontrar a un compañero de suicidio. 

En esa página encuentra a Roman un chico aparentemente normal y popular pero que carga con una gran culpa que no lo deja ni dormir. Aysel y Roman irán conociendo poco a poco los fantasmas del otro y recorriendo un camino que sólo tiene un único final. 

Cada vez llego más y más alto, y oigo cómo cruje la estructura del columpio.
-Ten cuidado -dice.
- ¿Por qué?
No estoy pensando en tener cuidado. Estoy pensando en un último empujón, en soltarme, en salir volando y caer.
-No puedes morirte sin mí -susurra. 

Lo primero que tengo que decir del libro es que la autora nos entrega una historia muy realista, sin tanto drama y con dos personajes secundarios extremadamente humanos. 

Por un lado tenemos a Aysel quien con su extraña forma de ser va encarando (o no) la vida que le toco. Siento que la forma de ser de ella contribuyó mucho a que a pesar del tema que estaba tratando la autora no resultara tan dramática la cosa. Por otro lado tenemos Roman quien es una bomba buscando estallar en cualquier momento. 

Ambos forman una pareja llena de angustia y desesperación que poco a poco irán viendo que a veces la tristeza no nos deja ver que alrededor de uno hay otra gente que siente la misma babosa negra en el interior. 

La historia me atrapo desde un principio tanto que me lo leí en menos de dos días, La autora creó una historia muy realista con la que me fue fácil empatizar y el final... aunque debo aceptar que no soy muy fan de “el amor es la solución a todo” (soy demasiado negativa para tragarme eso) admito que la historia de Aysel y Roman me pareció muy bonita y dulce. 

¿Crees que existe otra dimensión donde somos felices? ¿Dónde tú todavía tienes a tu padre y yo todavía tengo a Maddie? ¿Dónde somos un chico y una chica normales que están en la feria?

No quiero contarles más del libro para que ustedes mismos vean el camino que Aysel y Roman toman, así que para terminar una vez más quiero darle las gracias a PRH México por dejar la portada y título original que va mucho con la historia.