Te daría el sol... (Reseña)

Título: Te daría el sol

Saga: Libro único

Autor: Jandy Nelson

Editorial: Alfaguara/PRH

*Gracias a PRH por el libro*

Sinopsis:

Noah y su hermana gemela Jude son inseparables. El solitario Noah dibuja sin parar, y se ha enamorado en secreto de su enigmático vecino. La atrevida Jude salta desde altisimos acantilados, se pinta los labios de rojo y habla hasta por los codos.
Pero tres años después, a los 16, los hermanos ya no se hablan. Algo pasó entre ellos que arruinó dramáticamente su relación llevándolos por caminos diferentes... Hasta que Jude conoce aun chico guapo, frágil y arrogante... y a alguien más, una nueva fuerza en su vida, todavía más predecible y ligada a su pasado de forma inevitable.

Los primeros años de esta historia los cuenta Noah; los últimos, Jude. Lo que ninguno comprende es que apenas conocen la mitad de la historia y sin tan solo pudieran compartirla tendrían una oportunidad de regalarse el mundo de nuevo.

Hace unos años me leí “El cielo está en cualquier lugar” y pensaba que no podía amar más a la autora, pero estaba completamente equivocada. Después de leer este segundo libro de ella de verdad que la admiro con unas ganas locas y no puedo dejar de agradecerle por escribir esta bellísima historia. 

Se desliza por el sofá hasta pegarse a mí. Nosotros somos así. Es nuestra pose clásica. Unidos. Aparecemos de esta guisa incluso en la foto de la ecografía y así estábamos en el dibujo que Fry rompió ayer. A diferencia del resto de la humanidad, o casi, llevamos juntos desde que éramos cuatro células y llegamos al mundo a la vez. Por eso poca gente se da cuenta de que Jude tiende a hablar por los dos. Por eso solo sabemos tocar el piano a cuatro manos, pero no cada cual por su cuenta, y no podemos jugar a piedra, papel o tijera porque ni una vez, en trece años de vida, hemos elegido algo distinto. Siempre pasa

lo mismo: dos piedras, dos papeles, dos tijeras. Si no nos dibujó así, solo incluyo media persona.

En la literatura juvenil es muy difícil encontrar libro un que destile magia y realismo por partes iguales. Es difícil dar con un libro que logre tocar todas y cada una de las fibras sentimentales que tenemos en el cuerpo. Es difícil encontrar un libro que nos haga reír, suspirar, añorar y querer salir a bailar bajo la lluvia o gritar solo porque sí. 

Libros como este que te hacen ver todo el mundo con otros ojos, son de verdad contados. 

Esta clase de libros son de los que todo el mundo debe leer en la vida porque sin importar la edad que se tenga, el libro va a dejar su huella.

Reconocer a tu alma gemela se parece a entrar en una casa que conoces bien; reconocerás los muebles, los cuadros de la pared, los libros de los estantes, el contenido de los cajones. Podrías encontrar el camino a ciegas, de ser necesario.

No voy a decir que el libro es completamente perfecto porque no lo es, tiene un inicio que me ha costado un poco, pero conforme las hojas fueron avanzando, yo me fui adentrando en este mundoo de celos, alegrías, amores, desamores, locura, tristezas, mentiras, culpas, ilusiones, desilusiones, amistad, fraternidad… y ya no pude salir indemne de él. 

La historia está contada desde el punto de vista de los gemelos y a tiempos distintos. Noah nos cuenta el inicio de la historia cuando tenían 13 años y Jude nos cuenta el desenlace tres años después.

No quiero contarles más de la historia porque de verdad es un deleite ir descubriéndola poco a poco, así que me salto eso y les voy hablar de los personajes.

Noah y Jude no son perfectos, tienen muchos defectos y hay una rivalidad entre ellos que no será fácil de superar, pero para la edad que tienen, los gemelos tienen tanta profundidad que uno cree que jamás terminará de conocerlos del todo. 

Pero a pesar de que quede enamorada de ambos, tengo que confesar mi predilección por Noah pues había veces en las que era tan apasionado que me emocionaba mucho.

—Puede que las personas estén hechas de muchas personalidades distintas —sugiero —. A lo mejor estamos siempre acumulando nuevos yoes.
Sumando personalidades a medida que tomamos decisiones, buenas y malas, que metemos la pata o progresamos, que perdemos la cabeza y recuperamos el sentido, que nos hundimos, nos enamoramos, lloramos a un ser querido, crecemos, nos apartamos del mundo o lo agarramos por los cuernos, a medida que creamos cosas y las destruimos.

Y para terminar, tengo que agradecer a la editorial porque no cambiara el título del libro como hicieron en España, porque “Te daría el sol” tiene mucho más sentido con la historia. 

Así que en resumen, ¿Qué estas esperando para leerlo?