Reseña: La Corte Reluciente de Richelle Mead

Título: La Corte Reluciente
Saga: La Corte Reluciente (1/3)
Autora: Richelle Mead
Editorial: Roca Editorial/PRH
*Gracias a PRH por el libro*
Sinopsis:

Adelaide, una joven condesa de la nobleza osfridiana, se hace pasar por su propia sirvienta para escapar de un matrimonio impuesto por su familia. Adelaide solo desea abandonar los palacios refinados y llenos de oro de Osfrid para empezar una nueva vida entre los bosques inexplorados de Adoria. Pero para ello deberá unirse a la Corte Reluciente, que es tanto una escuela como un negocio diseñado para transformar a las niñas pobres en damas de clase alta para luego poder casarlas a través de matrimonios concertados con ricos poderosos del Nuevo Mundo.

Adelaide deberá esconder su origen real y al mismo tiempo evitar un matrimonio forzado en una sociedad en la que el papel de la mujer parece relegado solo al de esposa. Sin embargo, alguien descubrirá los verdaderos orígenes de la joven, con lo que empezará una huida sin retorno hacia tierras salvajes, peligrosas y desconocidas.

Adelaide, la condesa de Rothford es descendiente de uno de los hombres más importantes de Osfrid pero al quedar huérfana y al cargo de su abuela su riqueza ha menguado a tal grado que tiene que

casarse con alguien rico si quiere conservar su estilo de vida y estatus. Esto es un hecho que no molesta mucho a Adelaide pero cuando su abuela le presenta a su futuro marido y descubre en él a una persona sosa y a una suegra mandona y estricta sus deseos cambian y ahora no anhela más que la libertad. 

Libertad que conseguirá cuando una de sus empleadas es aceptada para participar en La Corte Reluciente, un lugar donde las más bellas mujeres de bajos recursos aprenderán a comportarse como unas damas con la esperanza de que puedan contraer matrimonio con los nuevos ricos de una nueva nación. Adelaide convence a su criada de huir y ella toma su puesto gracias a lo cual lográ salir del país para comenzar una nueva vida que a primera vista parece fácil pero que con el tiempo descubrirá que no es más sencilla que su vida anterior en especial cuando Cedric Thorn está junto a ella.

—¿Esas historias de piratas son ciertas? ¿Las heroicas y las despiadadas?
 —Las adoran, pero son reales. Toda leyenda tiene algo de verdad.

Después de haber leído Vampire Academy y la saga de Georgina Kincaid me declaré fan incondicional de Richelle Mead, así que cuando vi que este libro ya estaba en México me emocioné muchísimo pues esperaba encontrar en él todas las cosas por las que amo las novelas de la autora y mis expectativas hacía él eran muy altas. Tan altas que el libro no alcanzó a cumplirlas todas. 

Y es que yo esperaba encontrar a una protagonista valiente y fuerte como las que Mead me había presentado hasta ahora y aunque Adelaide no es una pésima protagonista no le llega ni a los talones a Rose y Georgina. Y es que soy muy consciente de que no debo comparar una cosa con la otra pero por más que lo intentaba no podía dejar de pensar en que Rose o Georgina se hubieran arrancado una mano antes de actuar como lo hacía Adelaide. 

Pero ya, voy a dejar de comparar (al menos por ahora) y les hablaré de Adelaide. Ella es una protagonista que sabe qué papel le toca. La novela está ambientada en una época que si bien no es la victoriana si tiene muchas similitudes con ella, así que el papel de Adelaide está limitado por su género. Es decir que desde el comienzo ella sabe y acepta que lo que se espera de ella es que se case y haga caso a lo que su esposo dice. Como dije, no es algo que me haya encantado pero a la vez entiendo que es el rol que le tocaba a ella y a todas las demás. Aún con ello, al final del libro lográ ver el final del túnel y como que una chispa se prende en ella y por fin alzá la cabeza para hacerse oír, así que supongo que al final no está tan mal.

Otra cosa que yo prácticamente daba por hecha y que no encontré, fue un personaje secundario con un sentido del humor un tanto peculiar que hace la historia divertida. Este tipo de personaje lo he encontrado en las dos anteriores series de la autora (aja, estoy hablando de ustedes Adrián y Carter) así que ya me estaba saboreando encontrarme con él y en realidad me quede con el antojo y la frustración de no encontrarlo pues siento que si hubiera estado la historia hubiera resultado menos sosa. 

En lugar de este “mítico” personaje nos encontramos con dos chicas pobres que se convertirán en las mejores amigas de la protagonista. Dos personajes que más bien conocemos muy poco (al menos por ahora porque ya vienen sus libros) y que nos dejan con grandes interrogantes. Creo que de las dos la que más me llamó la atención fue Mira quien desde el principio dejó en claro que guardaba secretos. Supongo que sus misterios la hacen más atractiva que Tamsin quien siempre deja en claro lo que quiere. 

Sobre Cedric Thorn… nuevamente voy a tener que hacer una comparación y es que tanto en VA como Georgina terminé terriblemente enamorada de las parejas de la protagonista (como olvidar a Dimka y al torpe pero hermoso escritor Seth) pero en este libro Cedric más bien me fue completamente indiferente. No es un personaje malo pero tampoco es un personaje que se haya dado a notar.

A veces, en el momento adecuado del día, pueden entreverse el uno al otro a través del cielo.

Sobre la historia en sí no puedo decir gran cosa. La narración es muy rápida para mi gusto pues en un par de hojas pasan volando ocho meses y cuando menos te das cuenta la estancia de Adelaide en La Corte Reluciente acaba. Otra cosa que me decepcionó pues ver a estas chicas intentando aprender ser todas unas damas fue de las pocas cosas que disfruté del libro. 

Esta narración tan rápida también afecta al final pues cuando por fin las cosas comienzan a ponerse buenas todo pasa tan rápido que es imposible quedar del todo satisfecho con el resultado. 

Quizá lo único que me encantó de principio a fin fue la ambientación de la historia. Mead logra describir al detalle cada aspecto de su mundo que yo prácticamente me veía ahí y mientras más conocía más tenía ganas de explorarlo y entender todos los aspectos de este. Como el asuntillo ahí de la religión y la herejía. Este fue otro de los puntos que disfrute del libro, la historia del dios todo poderoso y los doce ángeles que lo acompañaron a crear al mundo y los seis que cayeron al querer ser como los humanos.

Nunca asumas que tendrás que seguir el destino que alguien ha planeado para ti.

Al final de cuentas quedé muy decepcionada del libro pues sé que no es lo mejor que la autora puede lograr. Pero si tú no has leído nada de ella, este libro puede ser el indicado para ti, para que puedas conocer su pluma que al final con todos los fallos que he mencionado no deja de ser atractiva.